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sábado, 31 de agosto de 2013

MICRO-RELATOS (INTERMITENTES)




                                     


                                                              MICRO-RELATOS 


LA EXCUSA (MICRO-RELATO)

Aún hay lágrimas brotando de la mujer, el corazón ya no palpita, una histeria colectiva se apodera de la muchedumbre. Entre grito y grito, una anciana exclama: !está vendida, pobre mujer !. Tal vez será, que no hubo tiempo para pedir perdón.


METODOLOGÍA PARA HUIR

Sentado en el corredizo del Centro Médico, pasan gentes y gentes; y todos con el mismo saludo, buen día, buen día, yo como si estuviera la misma grabación respondo, buen día. Es extraño como se solidarizan las palabras y se alejan las personas. Frente a mí, un gran letrero,
Staff de Médicos, como soy un lector compulsivo, procedo a leer.

Pediatra – Jaquez, Báez.
Ortopeda-peña, Cabrera.
Ginecólogo-Paz, Montero.
Oftalmólogo-Peña, Lantigua.
Anestesiólogo-Acevedo, Ruiz.
Urólogo-Peralta, Liriano,
Neurólogo-Lizardo, Prieto.
Cardiólogo-Familia, Pérez.

Qué cardiólogo!, me paro del asiento, camino hacia la puerta frontal, me detengo, respiro profundamente; al parecer los quebrantos se han idos, miro hacia atrás, veo la puerta de cristal, y sin que nadie lo note, emprendo la huida.
   


AMANTES INFORMALES

La verdad es, que nadie puede evadir la magia de las tragamonedas. En el flujo y el reflujo de este hogar de noctámbulos, dos sombras acuerdan amor, es tan tétrica nuestra identidad, que el convenio no se hace en moneda local, es preferible el dólar, en la mesa continua; alguien grita: Black Jack, mas ellos, como políticos arrepentidos, se escurren entre la puerta de cristal, invisibles caricias, preámbulo de un adiós. El ocho es un número, no es el símbolo del infinito, en un motel cualquiera, se diluye una luz.  

EL ESPÍRITU DE LA NAVIDAD

Todos sentíamos ese susurro, pero no sabíamos de donde venia, nuestra piel de gallina nos preparaba para algo irregular, y de una forma sorprendente, brinque, la tome en mis manos, la lleve a mi pecho, y volví a vivir, mas todos aplaudieron, y a mis oídos, en voz baja, alguien dijo: feliz navidad.


DESPUÉS DEL INVIERNO (MICRO-RELATO)
EN EL PREÁMBULO DE MIS 50 AÑOS.


Sopla el viento, sobre su lomo, hojas que emigran hacia otros paraísos, las frías mañanas de Enero me inducen a tiempos pasados, y a mi lado como siempre, la vieja Belén; un ángel de la guarda que nunca me olvida, y este olor a madera quemada sobre mi piel. De momento no lloro por dolor, sino, por tu gracia Señor. 


DESLINDE 

En la solemnidad de la investidura; el diccionario se adueña del protagonismo, aplausos a granel, mas al salir del trance, un niño pide, una moneda para comer. Y es el único instante para darnos cuenta, que nuestra prenda de vestir más lujosa es: nuestra propia piel.  


DE……..

Quien decida entrar a éste lugar, tiene que estar preparado, se paga hasta la respiración.                 
Señor, perdón, 
el verifone indica: tarjeta bloqueada. 
-¡Diab…!
 La familia, espera.                                                                                                                          

ADICTA ORACIÓN

En algún lugar llamado casi-No, alguien ora, mientras la bola gira, bendito sea el verde, vengase usted doble 0, una voz pastosa como demo nos dice: uno, rojo.

EL MAGO

Esperaba el As de oro, de la nada emergió el 10 de espada, uffff… los dioses están durmiendo, se han comido los sueños, aún no inicia el  festín.

BLA, BLA, BLA……

En el extenuante calor, el semáforo parpadea, los carros aceleran. Ni es verde, ni es roja la luz, el olor a neumáticos, evoca las sirenas; hay gritos por doquier. En el noticiario de las 2 pm, el Intendente de energía, informa: que todo está bien. 
¡Que!.

DE ALQUILER


En algún callejón de la ciudad, hay un dialogo ilegal, no hay acuerdo en el monto a pagar; el vientre está preparado, el estrés limita la fertilidad, la miseria la duplica, el tiempo decidirá a quien llamara madre; una vez más, venció el hambre.



HOMBRE AL DESTIERRO

Llora el Cristo sobre el altar, la carne abofetea otra vez  la oración; no se pueden contar las heridas en la lengua. Cadenas perpetuas sobre orgasmo. Las hostias, neblina en nuestras manos; y después del bullicio, nadie dice nada. Es posible, que sea de color silencio la sotana. 

MANIQUÍES

Aquí, no se regala, se venden sueños.
Señora, despierte, hay una cuenta por pagar
El espejo sobre su pecho denota: que la pesadilla continúa.
El láser, no nos transporta al vientre.  

DE PASEO

La ciudad en movimiento, los arboles en aceleración continua, y para su asombro,
ellos, inmóviles, intermitentes letanías.
Hay un preámbulo para llegar al cielo, el epitafio.


SOBRE EL DILUVIO


En el vientre hay algo en alegría, las decisiones de momentos, nos llevan a delinquir.
La flor y la podredumbre, aroma de un ángel en desbandada. En algún retrete, un sueño muere.
Los cementerios, no sólo son para los muertos; la ciudad está plagada de cruces.



REFLEJO

Pensaba, que con sólo extender las manos, podría atrapar estrellas; el fuego en el bolsillo, quemaba las alas de la Ada madrina, es obvio que la lluvia no es un decolorante  que el tiempo no nos da tregua, que el sol es una bola de fuego, que cada día pasado, es un desafío, para quien se come sus recuerdos. 

CORREO

Duro tanto la carta, que sus pupilas se dilataron; mas cuando llego, el papel estaba en blanco, el remitente se oculto entre las estampillas, ella, nunca más volvió al bulevar. En la brevedad, el buzón estaba tomado.


ESCARAMUZA

Salta el caballo sobre la torre, caen los peones, mucho ante comenzar la batalla.
 La dama, carne enlatada en las vidrieras,
 en el vértice opuesto, el alfil no encuentra su ángulo.
 Jaque mate al rey, enroque largo, tiempo corto.  

JUEGO PELIGROSO 


De súbito, se detuvo frente al gran agujero, comenzó a vociferar;

- Hola, hola, hola....
Para su sorpresa, una voz le respondió;
- Hola, hola, hola....
Eufórico de alegría, volvió a vociferar 
- Yo aquí, yo aquí.....
Y la respuesta no tardo en llegar
- Yo aquí, yo aquí....
Reía a carcajada, no había duda del hallazgo, y de un tirón volvió a vociferar.
- Allá quién, allá quién.... 
Y en la brevedad la voz respondió 
-tú, tú, tú.... 
-Nooooo....
Dos palas de tierra sobre el ataúd. 

TARDE DE PERRO


Venia volando la esponja, no se de que latitud, el detergente atrapa desenfrenadas palabras  

en sus burbujas; se estalla contra el cristal. Nadie se da por enterado.
El calor hace explosionar el radiador, una pausa en la música, el locutor informa:
que el indice per-capital de vida esta disminuyendo, que la enfermedad pos- modernista es, el estrés.
Coñ.....
No joda, el cristal esta rayado




SONÁMBULOS  

No importa dónde y cómo.
En el parque, las oficinas, al cruzar la raya transversal de la calle, al volante, en el ómnibus.              
Ya no utilizamos la boca para hablar, es tiempo dactilar, tenemos sobrenombres, distorsionamos el lenguaje,
la memoria RAM evoluciona, el GB nos consume, somos sonámbulos, 
montones de huesos hacia un abismo de hologramas.
Y despierto, y despertamos.
Somos esclavos, títeres presumiendo libertad.



 PÓSTUMO ENLACE

Todo está listo.
Un vestido blanco, nieve, claveles, azul cielo.
- Qué hora son, por qué no llega.
El banquete predice que los glotones no faltaran, que las chismosas del barrio, tendrán de sobra para comentar.
Sigue nerviosa.
- los anillos, la música.
Una llamada, una voz dice: después del tono, su llamada será facturada.
Ella no comprende, todos los saben.
En la morgue, vestido de madera quemada,
un novio espera. 



LA CASA EN FRENTE

Es la # 7, entre sus rejas, un destartalado letrero ¨se alquila¨.
Van y vienen los transeúntes, siempre con la misma pregunta: ¿por qué no está habitada?
La mugres se adueña de su soledad, los espíritus envejecen en ella.
Hay ajuares al desmonte, alguien pretende habitarla,
Se escuchan ruidos en el tejado, es de noche.
En la tirantez y el desorden, los herederos viven dos cuadras, más allá del horizonte.


HOMBRE AL BORDE (JOSÉ TORTUGA)

Un hombre sentado en el triangular parque, son escasas las estrellas, esta amaneciendo; una mina inagotable de sonrisas. Desde un vehículo en marcha, alguien baja el cristal, lanza una bolsa y exclama: José tortuga, regálame una sonrisa.
Y él, sonríe, los olores se dibujan en el aire, toda nuestras loqueras se reinventan, en el asfalto, los milagros huelen a polvo, a escaso centímetros, una meretriz llora.       

EL BUEN SAMARITANO 

Jesús, era recolector, recolectaba: alimentos, medicinas, ropas. Recolectaba tanto, que recolectaba amor. El último sábado de cada mes, Jesús llenaba de felicidad a los ancianos del Hogar el Pastor; todos los esperaban, era un día de júbilo, se podía notar, que volvían a su niñez. Un día como cualquier otro, recibió un sobre timbrado, era beneficiario de un premio por su altruismo, su madre enloqueció de alegría, al llegar el día esperado, él partió a su destino, para su sorpresa, estaba sentado, al lado de Dios.

LA DEMANDA

Después de todo, él decidió lactar al bebe, el silicon en los senos de ella, la condena a la esterilidad, la inhibe de ser madre. El patrón confundido, no comprende, la demanda prenatal, sentado en el estrado, un bisturí delibera, que pase el próximo maniquís.





Fausto Antonio Aybar.

miércoles, 28 de agosto de 2013

A LOS 50 AÑOS DE UN GRAN DISCURSO (CUANDO LOS SUEÑOS LLEGAN, NO HAY TIEMPO PARA EL OLVIDO)



Tengo un sueño
Por Martin Luther King, Jr.
Discurso leído en las gradas del Lincoln Memorial durante la histórica Marcha sobre Washington
Estoy orgulloso de reunirme con ustedes hoy, en la que será ante la historia la mayor manifestación por la libertad en la historia de nuestro país.
Hace cien años, un gran estadounidense, cuya simbólica sombra nos cobija hoy, firmó la Proclama de la emancipación. Este trascendental decreto significó como un gran rayo de luz y de esperanza para millones de esclavos negros, chamuscados en las llamas de una marchita injusticia. Llegó como un precioso amanecer al final de una larga noche de cautiverio. Pero, cien años después, el negro aún no es libre; cien años después, la vida del negro es aún tristemente lacerada por las esposas de la segregación y las cadenas de la discriminación; cien años después, el negro vive en una isla solitaria en medio de un inmenso océano de prosperidad material; cien años después, el negro todavía languidece en las esquinas de la sociedad estadounidense y se encuentra desterrado en su propia tierra.
Por eso, hoy hemos venido aquí a dramatizar una condición vergonzosa. En cierto sentido, hemos venido a la capital de nuestro país, a cobrar un cheque. Cuando los arquitectos de nuestra república escribieron las magníficas palabras de la Constitución y de la Declaración de Independencia, firmaron un pagaré del que todo estadounidense habría de ser heredero. Este documento era la promesa de que a todos los hombres, les serían garantizados los inalienables derechos a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.
Es obvio hoy en día, que Estados Unidos ha incumplido ese pagaré en lo que concierne a sus ciudadanos negros. En lugar de honrar esta sagrada obligación, Estados Unidos ha dado a los negros un cheque sin fondos; un cheque que ha sido devuelto con el sello de "fondos insuficientes". Pero nos rehusamos a creer que el Banco de la Justicia haya quebrado. Rehusamos creer que no haya suficientes fondos en las grandes bóvedas de la oportunidad de este país. Por eso hemos venido a cobrar este cheque; el cheque que nos colmará de las riquezas de la libertad y de la seguridad de justicia.
También hemos venido a este lugar sagrado, para recordar a Estados Unidos de América la urgencia impetuosa del ahora. Este no es el momento de tener el lujo de enfriarse o de tomar tranquilizantes de gradualismo. Ahora es el momento de hacer realidad las promesas de democracia. Ahora es el momento de salir del oscuro y desolado valle de la segregación hacia el camino soleado de la justicia racial. Ahora es el momento de hacer de la justicia una realidad para todos los hijos de Dios. Ahora es el momento de sacar a nuestro país de las arenas movedizas de la injusticia racial hacia la roca sólida de la hermandad.
Sería fatal para la nación pasar por alto la urgencia del momento y no darle la importancia a la decisión de los negros. Este verano, ardiente por el legítimo descontento de los negros, no pasará hasta que no haya un otoño vigorizante de libertad e igualdad.
1963 no es un fin, sino el principio. Y quienes tenían la esperanza de que los negros necesitaban desahogarse y ya se sentirá contentos, tendrán un rudo despertar si el país retorna a lo mismo de siempre. No habrá ni descanso ni tranquilidad en Estados Unidos hasta que a los negros se les garanticen sus derechos de ciudadanía. Los remolinos de la rebelión continuarán sacudiendo los cimientos de nuestra nación hasta que surja el esplendoroso día de la justicia.
Pero hay algo que debo decir a mi gente que aguarda en el cálido umbral que conduce al palacio de la justicia. Debemos evitar cometer actos injustos en el proceso de obtener el lugar que por derecho nos corresponde. No busquemos satisfacer nuestra sed de libertad bebiendo de la copa de la amargura y el odio. Debemos conducir para siempre nuestra lucha por el camino elevado de la dignidad y la disciplina. No debemos permitir que nuestra protesta creativa degenere en violencia física. Una y otra vez debemos elevarnos a las majestuosas alturas donde se encuentre la fuerza física con la fuerza del alma. La maravillosa nueva militancia que ha envuelto a la comunidad negra, no debe conducirnos a la desconfianza de toda la gente blanca, porque muchos de nuestros hermanos blancos, como lo evidencia su presencia aquí hoy, han llegado a comprender que su destino está unido al nuestro y su libertad está inextricablemente ligada a la nuestra. No podemos caminar solos. Y al hablar, debemos hacer la promesa de marchar siempre hacia adelante. No podemos volver atrás.
Hay quienes preguntan a los partidarios de los derechos civiles, "¿Cuándo quedarán satisfechos?"
Nunca podremos quedar satisfechos mientras nuestros cuerpos, fatigados de tanto viajar, no puedan alojarse en los moteles de las carreteras y en los hoteles de las ciudades. No podremos quedar satisfechos, mientras los negros sólo podamos trasladarnos de un gueto pequeño a un gueto más grande. Nunca podremos quedar satisfechos, mientras un negro de Misisipí no pueda votar y un negro de Nueva York considere que no hay por qué votar. No, no; no estamos satisfechos y no quedaremos satisfechos hasta que "la justicia ruede como el agua y la rectitud como una poderosa corriente".
Sé que algunos de ustedes han venido hasta aquí debido a grandes pruebas y tribulaciones. Algunos han llegado recién salidos de angostas celdas. Algunos de ustedes han llegado de sitios donde en su búsqueda de la libertad, han sido golpeados por las tormentas de la persecución y derribados por los vientos de la brutalidad policíaca. Ustedes son los veteranos del sufrimiento creativo. Continúen trabajando con la convicción de que el sufrimiento que no es merecido, es emancipador.
Regresen a Misisipí, regresen a Alabama, regresen a Georgia, regresen a Louisiana, regresen a los barrios bajos y a los guetos de nuestras ciudades del Norte, sabiendo que de alguna manera esta situación puede y será cambiada. No nos revolquemos en el valle de la desesperanza.
Hoy les digo a ustedes, amigos míos, que a pesar de las dificultades del momento, yo aún tengo un sueño. Es un sueño profundamente arraigado en el sueño "americano".
Sueño que un día esta nación se levantará y vivirá el verdadero significado de su credo: "Afirmamos que estas verdades son evidentes: que todos los hombres son creados iguales".
Sueño que un día, en las rojas colinas de Georgia, los hijos de los antiguos esclavos y los hijos de los antiguos dueños de esclavos, se puedan sentar juntos a la mesa de la hermandad.
Sueño que un día, incluso el estado de Misisipí, un estado que se sofoca con el calor de la injusticia y de la opresión, se convertirá en un oasis de libertad y justicia.
Sueño que mis cuatro hijos vivirán un día en un país en el cual no serán juzgados por el color de su piel, sino por los rasgos de su personalidad.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño que un día, el estado de Alabama cuyo gobernador escupe frases de interposición entre las razas y anulación de los negros, se convierta en un sitio donde los niños y niñas negras, puedan unir sus manos con las de los niños y niñas blancas y caminar unidos, como hermanos y hermanas.
¡Hoy tengo un sueño!
Sueño que algún día los valles serán cumbres, y las colinas y montañas serán llanos, los sitios más escarpados serán nivelados y los torcidos serán enderezados, y la gloria de Dios será revelada, y se unirá todo el género humano.
Esta es nuestra esperanza. Esta es la fe con la cual regreso al Sur. Con esta fe podremos esculpir de la montaña de la desesperanza una piedra de esperanza. Con esta fe podremos trasformar el sonido discordante de nuestra nación, en una hermosa sinfonía de fraternidad. Con esta fe podremos trabajar juntos, rezar juntos, luchar juntos, ir a la cárcel juntos, defender la libertad juntos, sabiendo que algún día seremos libres.
Ese será el día cuando todos los hijos de Dios podrán cantar el himno con un nuevo significado, "Mi país es tuyo. Dulce tierra de libertad, a tí te canto. Tierra de libertad donde mis antecesores murieron, tierra orgullo de los peregrinos, de cada costado de la montaña, que repique la libertad". Y si Estados Unidos ha de ser grande, esto tendrá que hacerse realidad.
Por eso, ¡que repique la libertad desde la cúspide de los montes prodigiosos de Nueva Hampshire! ¡Que repique la libertad desde las poderosas montañas de Nueva York! ¡Que repique la libertad desde las alturas de las Alleghenies de Pensilvania! ¡Que repique la libertad desde las Rocosas cubiertas de nieve en Colorado! ¡Que repique la libertad desde las sinuosas pendientes de California! Pero no sólo eso: ! ¡Que repique la libertad desde la Montaña de Piedra de Georgia! ¡Que repique la libertad desde la Montaña Lookout de Tennesse! ¡Que repique la libertad desde cada pequeña colina y montaña de Misisipí! "De cada costado de la montaña, que repique la libertad".
Cuando repique la libertad y la dejemos repicar en cada aldea y en cada caserío, en cada estado y en cada ciudad, podremos acelerar la llegada del día cuando todos los hijos de Dios, negros y blancos, judíos y cristianos, protestantes y católicos, puedan unir sus manos y cantar las palabras del viejo espiritual negro: "¡Libres al fin! ¡Libres al fin! Gracias a Dios omnipotente, ¡somos libres al fin!"


Washington, DC
28 de agosto de 1963

sábado, 17 de agosto de 2013

PUENTE DE UTOPÍAS (ANTOLOGÍA POÉTICA) AIRES DE LIBERTAD




                                                            PUENTE DE UTOPÍAS 

                                   ANTOLOGÍA POÉTICA FORO AIRES DE LIBERTAD 

lunes, 12 de agosto de 2013

INVITACIÓN, DOMINGO 18 AGOSTO (AIRES DE LIBERTAD - CALIDOSCOPIO)

                                         AIRES DE LIBERTAD FORO POÉTICO Y LITERARIO

                                                                      
                                             RADIO RAÍCES 88.5 FM ARGENTINA



                                                                       INVITACIÓN 

El foro literario y poético (Aires De Libertad) junto al programa radial Calidoscopio les invitan este domingo 18 de agosto al gran encuentro a realizarse en la emisora raíces de la ciudad José León Suárez, en tal encuentro la conductora del programa Ana Maria Garrido tendrá como invitados a la escritora española Amelia Prieto y el poeta argentino José Manuel Palet, donde en una conversación amena el movimiento poético digital se abraza fraternalmente por la cultura universal.
A la 17 hora Argentina el compromiso es de todos, los poetas mas allá de las fronteras 
http://www.raices885.com.ar/, te esperamos, unidos somos más.







MICRORELATOS (VOCES AJENAS)

    Microrelatos  Autor. Fausto Antonio Aybar Ureña.   La intrusa. De repente, salió huyendo la come libro, la devoradora de palabras, é...