MONTSERRAT, HUÉSPED DE LA VID.
En el vientre
de mi primogénita luz
un ángel florece,
surca los confines
del universo un cometa en gestación;
tal vez de nombre paz,
de nombre amor.
de mi primogénita luz
un ángel florece,
surca los confines
del universo un cometa en gestación;
tal vez de nombre paz,
de nombre amor.
Entre mis ancestros
pasados la he buscado,
y ahí está, dormida,
escuchándome
desde su liquida cuna,
flor milenaria de un bosque virgen,
tierna sonrisa para un verbo que envejece.
pasados la he buscado,
y ahí está, dormida,
escuchándome
desde su liquida cuna,
flor milenaria de un bosque virgen,
tierna sonrisa para un verbo que envejece.
Montserrat,
llevará por nombre,
sendero de versos peregrinos,
romería de arco iris
sobre el lunar de un siglo
de esperanza,
de libertad,
umbilical sueño de la humanidad.
llevará por nombre,
sendero de versos peregrinos,
romería de arco iris
sobre el lunar de un siglo
de esperanza,
de libertad,
umbilical sueño de la humanidad.
Un pétalo
anida en tus manos,
en tus labios una canción.
En unísona tonada,
los peces,
los pájaros,
y los arboles
gritaran tu nombre.
¡Montserrat, huésped de la Vid,
Oriunda oración del sol!
anida en tus manos,
en tus labios una canción.
En unísona tonada,
los peces,
los pájaros,
y los arboles
gritaran tu nombre.
¡Montserrat, huésped de la Vid,
Oriunda oración del sol!
Fausto Antonio Aybar Ureña.